Se acaba de dar a conocer un estudio en donde los políticos hacen una vez más su alarde del "prometer prometer hasta meter..." (y no continúo). El estudio confirma mi experiencia en este sentido, que os contaré a continuación. Antes de las elecciones de mayo, decidí solicitar en Facebook "amistad" con Álvarez Cascos, que se había "estrenado" hacía poco en las redes sociales. No tardó en aceptarme, y allí el político asturiano ponía de todo (principalmente cosas graciosas, o mejor, "graciosillas" relacionadas con Asturias, del tipo: "los asturianos somos los más cachondos" y por el estilo).
Bueno, un día después (sí, al día siguiente) de las elecciones, decidí hacer la prueba y a ver lo que de verdad le importaba la gente, así que le volví a pedir amistad con otro perfil. Hasta hoy. No ha vuelto a aparecer, me imagino que estará ocupado, o que no le importará hasta que sean las próximas elecciones. Ande andará...
El estudio, a continuación.
Los comicios del pasado mes de mayo han marcado un antes y un después en las redes sociales de los candidatos. Y es que tras el 22M, más de la mitad de los políticos han descuidado sus social media e incluso los han dejado caer en el olvido, según el estudio 'Políticos 2.0: después de las elecciones', realizado por la agencia 101.
Según el informe de 101, un ejemplo claro de este descuido es el caso del candidato socialista Tomás Gómez quien después de las elecciones y tras felicitar a Esperanza Aguirre por su victoria, dejó morir su Twitter tras la derrota. No sucede así con su perfil en Facebook, utilizado para hacer oposición, aunque lo cierto es que lleva más de un mes sin actualizar.
También el Facebook del secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, José María Barreda, parece haberse quedado mudo tras la derrota del 22M, ajeno a los múltiples comentarios de sus seguidores en la red quienes piden una explicación convincente sobre el agujero presupuestario en su comunidad.
Otros, en lugar de abandonar sus canales tras las elecciones, han preferido dotarlos de contenido actual como es el caso del socialista Guillermo Fernández Vara, quien tras su salida de la Junta de Extremadura dedica su Twitter a hacer oposición de manera expresa bajo el epígrafe "controlando todo lo que hace quien gobierna".
"Políticos monologuistas"
Asimismo, según 101, hacer campaña y oposición en forma de monólogo parece la actividad preferida de algunos políticos en los social media tras los comicios de mayo. De hecho, el 70% pasa por alto los comentarios de sus seguidores sin responder de manera directa a las propuestas vertidas.
Algunos de los "monologuistas" más destacados en los social media son los populares María Dolores de Cospedal, actual presidenta de Castilla-La Mancha y una de las políticas con mayor número de seguidores en Facebook (15.734); el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón y la alcaldesa de Valencia, Rita Bárberá, quien ha hecho caso omiso a las críticas sobre Camps en su Facebook a raíz de su apoyo al expresidente valenciano.
En el lado socialista, se sitúa Leire Pajín, quien a pesar de sus polémicas cifras de aborto y ser ‘trending topic' tras su baño en bikini en Menorca gracias a "Pedrojota", aún no ha escrito ni un sólo tuit para los más de 4.700 seguidores que tiene en la red social.
Esperanza Aguirre y Luisa Fernanda Rudi, entre las más "sociales"
La más conversadora, según el estudio de 101, es la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien utiliza las redes no sólo para comentar su agenda oficial sino también para responder a sus seguidores. Ya sea ella o sus community manager, mantienen vivos sus canales online dando respuesta a cualquier cuestión siempre y cuando no sean temas personales.
También Luisa Fernanda Rudi, actual presidenta de Aragón, utiliza sus perfiles para subir imágenes de actos señalados como, por ejemplo, las de su investidura o toma de posesión de sus consejeros, así como para agradecer y responder a los comentarios de sus seguidores.
Asimismo, tanto el candidato a la presidencia del Gobierno de IU Gaspar Llamazares como el popular alcalde del pueblo de Jun, José Antonio Rodríguez Salas, utilizan las redes como escenario de debate para tratar temas tan candentes como el caso Gürtel o simplemente interactuar con los ciudadanos.
Llama la atención cómo el adelanto electoral del 20N ha reanimado los perfiles de los políticos más mediáticos. En el bando socialista destaca el recién inaugurado Twitter de su candidato, Alfredo Pérez Rubalcaba, @conRubalcaba, que guiado por su equipo electoral ya roza los 21.600 seguidores, y se mantiene muy activo.
En el bando contrario, el Twitter de los populares echa humo desde que José Luís Rodríguez Zapatero anunciase simultáneamente el adelanto de las elecciones en las redes sociales. También Mariano Rajoy en su Facebook ha comenzado a hacer campaña con mensajes que apuntan a "un cambio" y a la mejora de la economía.
Adictos a las nuevas redes
Por otra parte, el boom de las redes sociales es tal que hay políticos verdaderamente "enganchados" a lo último del entorno digital. Es el caso, por ejemplo, del portavoz de IU en la Asamblea de Madrid, Gregorio Gordo o el presidente del Gobierno de Canarias Paulino Rivero, a quienes no bastándoles estar presentes en Facebook y Twitter se han lanzado a probar la nueva red social de Google (Google+).
También el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, es todo un aficionado a hacer "check in" en Foursquare, una aplicación basada en la geolocalización web para redes sociales que permite saber el lugar exacto en el que está el alcalde, así como conocer su opinión sobre destinos tan variopintos como restaurantes, playas o ciudades.
Fuente del estudio: 101
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