El pendrive de Verisign que al fin llegó

Como recordaréis, hace escasas fechas publiqué una entrada sobre un pendrive de Verisign y que al final no me enviaron. Como se suele decir, "de bien nacidos es ser agradecidos", y al fin hoy, gracias a las gestiones de Andrew, tengo el pendrive en mis manos.

Andrew, en nombre de la propia Verisign, tuvo la gentileza de enviarme un comentario al post en el que ponía que enmendarían el error (o la confusión, o el incidente, o lo que sea) y se ocuparía de que me enviaran el susodicho pendrive. Dicho y hecho, le respondí a vuelta de correo con mi dirección, y aquí está la memoria usb.

La verdad es que, a veces, nos olvidamos que detrás de las grandes empresas o corporaciones existen personas, y son esas personas las que, al fin y al cabo, importan. Me satisface enormemente que alguien en una compañía como Verisign se preocupe por detalles tan pequeños como enviar un pendrive por haberlo publicado en un blog tan humilde como este.

¡Muchas gracias por las molestias, Andrew!